miércoles, 24 de noviembre de 2010

Benedicto XVI y el uso del preservativo (II)

COMENTARIO BLOGUERIL:

Les dejo unos textos que aclaran el tema oscurecido por la lectura rápida de alguna prensa anticatólica.

Las palabras del Papa sobre el preservativo en el libro “Luz del mundo”
CIUDAD DEL VATICANO, martes 23 de noviembre de 2010 (ZENIT.org).- A petición de nuestros lectores, ofrecemos a continuación el fragmento del libro-entrevista Luz del mundo en el que Benedicto XVI aborda la cuestión del uso del preservativo (páginas 130 a 132). El libro ha sido publicado en España por la Editorial Herder.
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Con su viaje a África en marzo de 2009 la política del Vaticano en relación con el sida quedó una vez más en el mira de los medios. El veinticinco por ciento de los enfermos de sida del mundo entero son tratados actualmente en instituciones católicas. En algunos países, como por ejemplo en Lesoto, son mucho más del cuarenta por ciento. Usted declaró en África que la doctrina tradicional de la Iglesia ha demostrado ser un camino seguro para detener la expansión del VIH. Los críticos, también de las filas de la Iglesia, oponen a eso que es una locura prohibir a una población amenazada por el sida la utilización de preservativos.

“El viaje a África fue totalmente desplazado en el ámbito de las publicaciones por una sola frase. Me habían preguntado por qué la Iglesia católica asume una posición irrealista e ineficaz en la cuestión del sida. En vista de ello me sentí realmente desafiado, pues la Iglesia hace más que todos los demás. Y sigo sosteniéndolo. Porque ella es la única institución que se encuentra de forma muy cercana y concreta junto a las personas, previniendo, educando, ayudando, aconsejando, acompañando. Porque trata a tantos enfermos de sida, especialmente a niños enfermos de sida, como nadie fuera de ella.
He podido visitar uno de esos servicios y conversar con los enfermos. Ésa fue la auténtica respuesta: la Iglesia hace más que los demás porque no habla sólo desde la tribuna periodística, sino que ayuda a las hermanas, a los hermanos que se encuentran en el lugar. En esa ocasión [vuelo a África en marzo de 2009] no tomé posición en general respecto del problema del preservativo, sino que, solamente, dije -y eso se convirtió después en un gran escándalo-: el problema no puede solucionarse con la distribución de preservativos. Deben darse muchas cosas más. Es preciso estar cerca de los hombres, conducirlos, ayudarles, y eso tanto antes como después de contraer la enfermedad.
Y la realidad es que, siempre que alguien lo requiere, se tienen preservativos a disposición. Pero eso solo no resuelve la cuestión. Deben darse más cosas. Entretanto se ha desarrollado, justamente en el ´ambito secular, la llamada teoría ABC, que significa: “Abstinence-Be faithful-Condom!” [Abstinencia-Fidelidad-Preservativo], en la que no se entiende el preservativo solamente como punto de escape cuando los otros dos puntos no resultan efectivos. Es decir, la mera fijación en el preservativo significa una banalización de la sexualidad, y tal banalización es precisamente el origen peligroso de que tantas personas no encuentren ya en la sexualidad la expresión del amor, sino sólo una suerte de droga que se administran a sí mismas. Por eso, la lucha contra la banalización de la sexualidad forma parte de la lucha por que la sexualidad sea valorada positivamente y pueda desplegar su acción positiva en la totalidad de la condición humana.
Podrá haber casos fundados de carácter aislado, por ejemplo, cuando un prostituido utiliza un preservativo, pudiendo ser esto un primer acto de moralizacion, un primer tramo de responsabilidad a fin de desarrollar de nuevo una consciencia de que no todo está permitido y de que no se puede hacer todo lo que se quiere. Pero ésta no es la auténtica modalidad para abordar el mal de la infección con el VIH. Tal modalidad ha de consistir realmente en la humanización de la sexualidad.
¿Significa esto que la Iglesia católica no está por principio en contra de la utilización de preservativos?
Es obvio que ella no los ve como una solución real y moral. No obstante, en uno u otro caso pueden ser, en la intención de reducir el peligro de contagio, un primer paso en el camino hacia una sexualidad vivida de forma diferente, hacia una sexualidad más humana.

TEXTO DEL BLOG LA IGLESIA EN LA PRENSA.

Crónica de un “escándalo” anunciado
El modo en que las palabras del Papa sobre preservativo y Sida/AIDS, en el libro “La Luz del Mundo”, han sido presentadas por buena parte de la prensa manifiesta, desde mi punto de vista, un problema preocupante: que el “sistema mediático” es incapaz de recibir una afirmación matizada. Cuando digo “sistema”, me refiero a personas, pues el periodismo lo hacemos unas personas llamadas periodistas.
Puedo afirmar, a través de varias conversaciones en estos años con gente implicada, que si “el Vaticano” -como se suele decir, así en general- no han abordado antes públicamente esta cuestión ha sido, precisamente, por la preocupación de que ocurriera lo que está ocurriendo: que se presentara como una “bendición” del preservativo por parte de la Iglesia. Ahora Benedicto XVI ha asumido ese riesgo, usando una fórmula informal, la entrevista periodística.
El Papa ha dicho que el uso del preservativo en un acto ya de por sí inmoral (por ejemplo, prostitución), en algunas ocasiones puede ser un paso para la moralización, en el sentido de que puede servir para reconocer que no todo está permitido (veo que con mi acción puedo contagiar a otros de una enfermedad). Esa es la breve respuesta a una cuestión muy puntual, en la que no entra en otras consideraciones (como la eficacia o no del preservativo para evitar la transmisión de enfermedades, etc.). Y es que el Papa lo que propone no es eso: afirma que lo que hay que hacer –como única solución- es humanizar la sexualidad, luchar contra su banalización.
Mi glosa: entre matar con una pistola o con una bomba atómica, mi respuesta es no matar, pues se trata de un acto inmoral. Reconozco que es “preferible” matar con una pistola, pues produce menos víctimas. Eso no quiere decir que “apoye” el asesinato o el uso de las pistolas. Sostengo que lo que hay que hacer es no matar, sino al contrario, valorar la vida. (Ya sé que la comparación no es perfecta, pero a mi me ayuda para entender mejor de qué estamos hablando). Supongo que el tema seguirá de actualidad todavía por algún tiempo (lo que demuestra que esta obsesión con el preservativo da razón al diagnóstico del Papa sobre la banalización del sexo).

sábado, 20 de noviembre de 2010

Benedicto XVI y el uso del preservativo

El Papa Benedicto XVI afirma que el uso del condón se justifica en algunos casos

En una nueva publicación, el Sumo Pontífice mencionó que el uso del condón puede justificarse en algunos casos, como es el de los hombres que se dedican a la prostitución quienes recurren a esta protección para impedir la propagación del virus que causa el sida.

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CIUDAD DEL VATICANO (AP) — El papa Benedicto XVI dijo en un nuevo libro que el uso de los condones puede justificarse en algunos casos, como cuando hombres que se dedican a la prostitución recurren al preservativo para impedir la propagación del virus que causa el sida.

La postura del pontífice está contenida en una entrevista con un periodista alemán que sirvió para la elaboración del libro "Light of the World: The Pope, the Church and the Signs of the Times" ("Luz del Mundo: El Papa, la Iglesia y las señales de los tiempos").

El periódico del Vaticano difundió el sábado extractos del libro.

Las enseñanzas de la Iglesia católica se han opuesto desde hace mucho tiempo a la utilización de los condones debido a que son una forma artificial de anticoncepción. El Vaticano ha sido objeto de fuertes críticas debido a su postura ante la crisis del sida.

En el caso de los hombres dedicados a la prostitución —para quienes la anticoncepción no es un asunto central— los condones no constituyen una solución moral, manifestó el sumo pontífice. No obstante, afirmó que se justifica que los utilicen "con el propósito de reducir el peligro de infección".

En marzo del 2009, Benedicto XVI acarreó críticas sin precedente de parte de gobiernos europeos, organizaciones internacionales y científicos cuando afirmó durante un viaje a Africa que los condones no resolvían el problema del sida, sino que, por el contrario, lo agudizaban.

Francia, Alemania y la agencia de las Naciones Unidas a cargo de combatir el sida condenaron tal declaración y la calificaron de irresponsable y peligrosa.

Aunque la oposición de la Iglesia a los preservativos data de hace mucho tiempo, el Vaticano se vio obligado a intervenir y afirmar que el Papa había querido subrayar que la confianza en los condones era un distractor ante la necesidad de una educación adecuada en conducta sexual.

Benedicto XVI también dijo en el nuevo libro que si un Papa tiene capacidad "física, sicológica y espiritual" para cumplir su trabajo, entonces tiene el "derecho, y en algunas circunstancias, la obligación de renunciar".

sábado, 25 de septiembre de 2010

Mensaje de los obispos de Caracas ante elecciones parlamentarias del 26S (2010)

Elecciones en Venezuela y paz
Comunicado de los obispos de Caracas
CARACAS, sábado, 25 de septiembre de 2010 (ZENIT.org).- Publicamos el comunicado que han emitido los obispos de Caracas ante las elecciones parlamentarias que se celebran este domingo, 26 de septiembre, en Venezuela.

1.- Ante las inminentes elecciones parlamentarias nosotros, el Cardenal Arzobispo de Caracas y los Obispos Auxiliares, pastores del Pueblo de Dios y promotores de la paz en nuestra querida Ciudad de Caracas, hacemos un llamado a participar activamente en este proceso electoral decisivo para el futuro de Venezuela.
2.- Los venezolanos estamos ante una encrucijada histórica en la que debemos actuar con decisión por la paz, en el marco de valores humanos fundamentales: el pluralismo democrático, y los derechos humanos, sociales, económicos y políticos que nos garantiza la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.
3.- No podemos abstenernos. Se trata de fortalecer la democracia y garantizar el futuro del país. Es la hora de la participación activa, decidida y solidaria para promover la fraternidad, la inclusión de todos sin discriminación alguna, la libertad y la justicia. ¡Es la hora de votar!
4.-El voto es secreto. Solo Dios sabrá por quien votaremos. Por lo tanto, no hay razón para el temor ante amenazas indebidas. El voto libre y en conciencia es un derecho y al mismo tiempo una obligación cívica y también cristiana.
5.- Hacemos un llamado a que estas elecciones se realicen sin violencia alguna y con sujeción a las normas constitucionales y legales que regulan los procesos electorales. Y por último, insistimos en el respeto a la voluntad de los electores. Los resultados deben ser acatados y aceptados por todos los actores políticos y por todos los venezolanos.
6.- En esta hora decisiva encomendamos nuestra querida Patria a la maternal intercesión de María Santísima, Nuestra Señora de Coromoto, Patrona de Venezuela, para que Dios nos conceda trabajar y vivir siempre en paz.
Caracas, 16 de septiembre de 2010
Cardenal Jorge Urosa Savino,
Arzobispo de Caracas
Mons. Saúl Figueroa A.
Obispo Auxiliar de Caracas
Mons. Luis Tineo R
Obispo Auxiliar de Caracas
Mons. Jesús González de Zárate
Obispo Auxiliar de Caracas
Mons. Fernando Castro A.
Obispo Auxiliar de Caracas

sábado, 31 de julio de 2010

Protestantismo avanza en Iberoamérica según "El País" de España

REPORTAJE
Lutero avanza en América Latina
Las iglesias evangélicas, con un fuerte papel social, se multiplican en Brasil y Centroamérica y amenazan la tradicional hegemonía católica
CARLOS G. CANO - Madrid - 30/07/2010 EL PAÍS (España).
El protestantismo avanza en América Latina. No hay estadísticas unificadas pero en El Salvador, según una reciente encuesta del IUDOP -instituto dependiente de la jesuita Universidad Centroamericana-, los que se declaran protestantes -en 1988, apenas un 16%- hoy suponen más del 38% de la población. Y en el resto del continente, con la excepción de México, al menos una de cada 10 personas es protestante. En algunos casos, como en Guatemala, hasta se anuncia que el país será pronto mayoritariamente evangélico.

Pero, aunque en Centroamérica la tendencia es pronunciada, los datos también hablan por sí mismos al sur de Panamá. Hasta 1960, en Brasil los protestantes siempre se habían mantenido por debajo del 5%. Pero durante los noventa, la proporción pasó del 9% al 15,4%. Y ahora, con unos 30 millones de evangélicos, los brasileños le disputan a Alemania, Sudáfrica y Nigeria la tercera plaza en el ranking de los países con más protestantes del mundo, liderada por EE UU y Reino Unido.
El protestantismo histórico, el de Lutero, el de Calvino o el anglicano, fue siempre muy minoritario en la América colonial, y hasta principios del siglo XX, con el revival norteamericano y la expansión de las iglesias pentecostales, no empezó a echar raíces. Pero, ¿a qué se debe un cambio tan considerable en un continente que durante siglos ha sido aplastantemente católico?
Samuel Rodríguez, director de la mayor organización hispanoevangélica de EE UU, la NHCLC, arguye tres motivos: que para convertirte "no tienes que cambiar tu cultura porque el Evangelio puede entrar con salsa o con mariachis"; que la Iglesia evangélica propone "una relación personal con Dios, sin burocracia religiosa", y que, frente a las dictaduras, "la religión ofreció libertad".
El antropólogo salvadoreño Carlos Lara afirma que, en su país, el auge del protestantismo "tiene que ver con la guerra" y, aunque solo en parte, también con una cierta "reacción apolítica a la Teología de la Liberación". Pero, para Lara, lo fundamental es el cambio sociocultural.
Otro de los baluartes evangélicos es su rol social: centros de rehabilitación para drogadictos, apoyo en las cárceles, colegios... Pero no solo actúan a gran escala. Las iglesias evangélicas "funcionan como microsociedades en las que los niveles de ayuda mutua son muy fuertes", explica Lara.
Hay quien hasta atribuye al protestantismo un cierto efecto ascensor. Pero el antropólogo estadounidense David Stoll, autor en 1990 del premonitorio ensayo Is Latin America turning protestant?, se muestra escéptico: "Pasar cuatro noches en la iglesia, en vez de borracho en la calle, mejora la alimentación de los niños y promueve roles familiares más adecuados. Pero no se puede demostrar que hacerse evangélico mejore tu posición social".
Ante la pérdida de fieles, Crisóforo Domínguez, de la Conferencia Episcopal latinoaméricana, opina que, más que un error, la Iglesia católica ha cometido un "pecado de omisión". Al preguntarles por la visita de Benedicto XVI a Brasil en 2007 -interpretada entonces como una forma de frenar las conversiones evangélicas-, el dictamen de los académicos consultados por EL PAÍS es unánime: no sirvió de nada.
Samuel Rodríguez no duda de que, para finales de siglo, el continente será "mayoritariamente evangélico". Pero no todos lo tienen tan claro. El teólogo español y profesor en Georgetown (Washington) José Casanova señala que "las proyecciones no se están cumpliendo". Y el sociólogo brasileño Antonio Pierucci apunta que "había muchos católicos dispuestos a abrazar una religión más exigente en términos de comportamiento y dedicación. Incluso en lo monetario. Pero no todos", dice, "y eso marcará el techo".
Proyecciones estadísticas al margen, nadie concede demasiada importancia a las consecuencias. Samuel Rodríguez cree que "los valores [evangélicos y católicos] son los mismos". Tanto que los compara con "una pepsi y una coca-cola". Antonio Pierucci, por su parte, descarta un cambio cultural: "El gran problema es que los evangélicos prohíben el alcohol, así que después de una boda beben agua o zumo de fruta. ¿Sabe cuánto dura una fiesta de esas?", pregunta con ironía. Lo que sí parece evidente es que la óptica evangélica reserva a la mujer un papel socialmente más protagónico. "Ese es un aspecto muy importante", dice José Casanova. "Y no tanto por los pastores -en las iglesias protestantes pueden ser mujeres- como por la clientela femenina, que contrarresta el machismo".
También hay quien dibuja cierta norteamericanización en la cultura, pero José Casanova apunta que, en todo caso, la influencia será bidireccional. "En EE UU, a largo plazo, habrá un desplazamiento prodemócrata del voto evangélico hispano". Samuel Rodríguez confirma que, hasta que llegó la ley "racista" de Arizona, "el pueblo latino estaba destinado a votar republicano".
Otro de los efectos del auge del protestantismo, según José Casanova, es la "renovación" católica: "En Brasil los carismáticos [con prácticas ceremoniales similares a las de algunos evangélicos] representan más de un 20%". Samuel Rodríguez apunta incluso hacia la política: "Muchos líderes exitosos hablan de redención y de Jesús". Hasta "la fraseología de Hugo Chávez es evángelica", dice. Y Twitter parece darle la razón. Después de abrir la tumba de Bolívar, el presidente venezolano twitteó: "Dios mío, Dios mío. Cristo mío, Cristo Nuestro. Mientras oraba en silencio viendo aquellos huesos, pensé en ti".

viernes, 4 de junio de 2010

¿Cómo debe comportarse un cristiano en política?

La Iglesia se concentra particularmente en educar a los discípulos de Cristo, para que sean cada vez más testigos de su Presencia, en todas partes. Toda a los fieles laicos mostrar concretamente en la vida personal y familiar, en la vida social, cultural y política, que la fe permite leer de una forma nueva y profunda la realidad y transformarla; que la esperanza cristiana alarga el horizonte limitado del hombre y le proyecta hacia la verdadera altitud de su ser, hacia Dios; que la caridad en la verdad es la fuerza más eficaz capaz de cambiar el mundo; que el Evangelio es garantía de libertad y mensaje de liberación; que los principios fundamentales de la Doctrina Social de la Iglesia – como la dignidad de la persona humana, la subsidiariedad y la solidaridad – son de gran actualidad y valor para la promoción de nuevas vías de desarrollo al servicio de todo el hombre y de todos los hombres. Compete también a los fieles laicos participar activamente en la vida política, de modo siempre coherente con las enseñanzas de la Iglesia, compartiendo razones bien fundadas y grandes ideales en la dialéctica democrática y en la búsqueda de un amplio consenso con todos aquellos a quienes importa la defensa de la vida y de la libertad, la custodia de la verdad y del bien de la familia, la solidaridad con los necesitados y la búsqueda necesaria del bien común. Los cristianos no buscan la hegemonía política o cultural, sino, allí donde se comprometen, son movidos por a certeza de que Cristo es la piedra angular de toda construcción humana (cfr Congr. para la Doctrina de la Fe, Nota Doctrinal sobre algunas cuestiones relativas al compromiso y al comportamiento de los católicos en la vida política, 24 nov. 2002).
(Benedicto XVI, Discurso a los miembros del Consejo Pontificio para los Laicos con motivo de la celebración de su XXIV Asamblea Plenaria: “Testigos de Cristo en la comunidad política”, 21-V-2010).

Me gusta este principio de llevar a Cristo a todas las realidades con nuestro ejemplo de vida. Creo que es lo que más me cuesta y lo que más me preocupa: ¿Ven en mí a un cristiano?. Tener claro los principios de la DSI: la dignidad de la persona humana, la subsidiariedad y la solidaridad. Debemos buscar además EL CONSENSO, en especial con los que anhelan la defensa de la vida y de la libertad, la custodia de la verdad y del bien de la familia, la solidaridad con los necesitados y la búsqueda necesaria del bien común. Y para finalizar con broche de oro: Los cristianos no buscan la hegemonía política o cultural. ¡Maravilloso!. Somos democráticos, somos tolerantes, somos pacientes, somos humildes. Nos vemos como parte de una sociedad donde somos uno más, y no queremos DICTADURAS NI TOTALITARISMOS DE NINGÚN TIPO, NI SIQUIERA EL RELIGIOSO. Pero esta tolerancia cristiana no significa que debemos buscar principios comunes tal como señala el Papa a continuación.

La difusión de un confuso relativismo cultural y de un individualismo utilitarista y hedonista debilita la democracia y favorece el dominio de los poderes fuertes. Hay que recuperar y revigorizar una auténtica sabiduría política; ser exigentes en lo que se refiere a la propia competencia; servirse críticamente de las investigaciones de las ciencias humanas; afrontar la realidad en todos sus aspectos, yendo más allá de todo reduccionismo ideológico o pretensión utópica; mostrarse abiertos a todo verdadero diálogo y colaboración, teniendo presente que la política es también un complejo arte de equilibrio entre ideales e intereses, pero sin olvidar nunca que la contribución de los cristianos es decisiva sólo si la inteligencia de la fe se convierte en inteligencia de la realidad, clave de juicio y de transformación. Es necesaria una verdadera “revolución del amor”. (Benedicto XVI, Discurso a los miembros del Consejo Pontificio para los Laicos con motivo de la celebración de su XXIV Asamblea Plenaria: “Testigos de Cristo en la comunidad política”, 21-V-2010).

¿Cómo combatir el relativismo? ¿Cómo construir bases sólidas en la Verdad sin ser intolerante?.

domingo, 23 de mayo de 2010

Copérnico de nuevo en la Catedral Frombork (Polonia),


Copérnico, enterrado por segunda vez
Nicolás Copérnico, el científico polaco impulsor de la teoría heliocéntrica, fue enterrado de nuevo en la catedral de Frombork (Polonia), donde se encontraba su tumba hasta que, hace cuatro años, sus restos fueron exhumados para someterlos a un análisis de ADN y confirmar su identidad.
Copérnico (1473-1543) descansará bajo el altar mayor del templo, en un sepulcro de granito negro de más de dos toneladas de peso, presidido por una lápida de tres metros de altura que recordará a una de las figuras fundamentales de la astronomía moderna.
El entierro fue oficiado por el nuncio del Papa en Polonia, Jozef Kowalczyk, y el arzobispo de Lublin, Jozef Zycinski, en una ceremonia en la que la Iglesia católica despidió con solemnidad a un hombre de ciencia que en su tiempo fue considerado un hereje por sus ideas revolucionarias.
Hasta ahora, y tras su exhumación, la tumba provisional de Copérnico se ubicó en el castillo de Olsztyn, donde el científico vivió parte de su vida, y posteriormente en la catedral de esa misma ciudad.
Un periplo de cinco años
El periplo del astrónomo comenzó en 2005, cuando arqueólogos polacos hallaron sus restos mortales en una pequeña tumba sin nombre en la catedral de Frombork, en la costa polaca del mar Báltico.
Ante las dudas de si esos restos pertenecían verdaderamente a Copérnico, los huesos fueron exhumados para someterlos a un análisis de ADN, que finalmente confirmó que se trataba del célebre polaco.
Posteriormente un equipo de científicos suecos presentó la reconstrucción facial del cráneo encontrado y pusieron cara a Copérnico, un hombre con nariz aguileña y ojos hundidos, tal y como ya se mostraba en los retratos que se conservan de él en Polonia.
El astrónomo marcó un antes y un después en el estudio de la astronomía con su obra "De Revolutionibus Orbium Coelestium" (Sobre las revoluciones de los cuerpos celestes).
En ese texto, basándose en cálculos matemáticos y astronómicos, Copérnico dota de base científica una antigua teoría heliocéntrica griega, según la cual es la Tierra la que gira alrededor del Sol y no al revés, como se creía hasta entonces.

sábado, 8 de mayo de 2010

Karol Wojtyla: Tesis doctoral "La doctrina de la fe según San Juan de la Cruz" (1948). Leyendo la biografía de Juan Pablo II de Weigel (XII)

El padre Garrigou-Lagrange se convirtió en director de la tesis doctoral de Karol Wojtyla, que examinaba la interpretación de la fe de San Juan de la Cruz. (…) Para Wojtyla como para Jan Tyranowski, los escritos del carmelita español trazaban el mapa del terreno de la experiencia mística. (…) La tesis es la tensión entre la especulación teológica de San Juan de la Cruz y la teología eclesiástica de Santo Tomás de Aquino.
En su tesis Wojtyla ponía énfasis en la naturaleza personal del encuentro humano con Dios, en el que los creyentes trascienden de tal modo los límites de su existencia como criaturas, que se tornan más auténticamente ellos mismos. Ese encuentro con el Dios viviente no está reservado tan sólo a los místicos. Es el centro de toda vida cristiana. La experiencia mística revela cosas acerca del camino hacia Dios y la comunión con Él; y que la mayor sabiduría que podemos alcanzar es la de saber que podemos “objetivizar” nuestro conocimiento de Dios, pues no llegamos a conocerle como conocemos un objeto, sino como conocemos a una persona, a través de la entrega mutua de uno mismo. Como dos personas que se aman llegan a vivir una “dentro” de la otra sin perder sus propias y únicas identidades. Dios llega a vivir en nuestro interior y, en cierto sentido, nosotros llegamos a habitar “Dentro de Dios”, sin que las diferencias radicales entre Creador y criatura se hayan perdido. El objetivo de la vida cristiana es convertirse en Dios por participación.
La tesis de Wojtyla extraía otras tres conclusiones:
1) Puesto que Dios no puede ser conocido como conocemos un objeto, existen límites para la racionalidad como aproximación al misterio de Dios. La razón puede saber que Dios existe, pero la razón natural es incapaz de explicarnos todos los atributos de Dios de la Biblia.
2) La fe es un encuentro personal con Dios, pero no nos permite su “aprehensión”, porque sería mayor que Dios. Porque es persona no es objeto.
3) La comunión mística, más que una “subida” emocional, es una experiencia de comunión, de “hallarse con”, que trasciende por completo las convenciones de nuestra existencia como criaturas.
Dada la naturaleza intensamente personal del encuentro con Dios, la persona humana debe disfrutar de libertad, pues a una relación de mutua autoofrenda sólo puede accederse libremente.
(…) El 14 de junio de 1948, aprobó los exámenes doctorales con puntuaciones altas, la tesis obtuvo una puntuación de dieciocho sobre veinte. Pero por no poder pagar la impresión de la tesis no se pudo graduar en la Angelicum, sino en la Facultad de Teología de la Jagelloniana en diciembre de ese año.

(Weigel, George; 1999, Biografía de Juan Pablo II. Testigo de la esperanza, Pp. 127-129).

jueves, 6 de mayo de 2010

¿Qué hay detrás del éxito de la campaña “Católicos, regresen a casa”?

¿Qué hay detrás del éxito de la campaña “Católicos, regresen a casa”?
Una entrevista con su fundador, Tom Peterson
ROMA, jueves 6 de mayo de 2010 (ZENIT.org).- Gracias a la campaña Catholics come home, (Católicos, regresen a casa), fundada por el estadounidense Tom Peterson, más de 200.000 mil personas en Estados Unidos, entre ateos, ex católicos y católicos no practicantes, han decidido regresar al seno de la Iglesia para vivir y testimoniar la fe católica. Por medio de publicidad en diferentes canales de televisión en Estados Unidos y de la página web http://www.catholicscomehome.org/ también con versión en español, http://www.catolicosregresen.org decenas de miles de personas han podido encontrarse con un mensaje que invita a descubrir la esencia del catolicismo, su alcance a lo largo de la historia, así como con la alegría que representa para millones de fieles alrededor del mundo vivir la fe católica.
Tom Peterson participó la semana pasada en el VII Seminario profesional para los gabinetes de comunicación de la Iglesia, que se realizó en la Universidad Santa Croce en Roma, donde habló sobre esta campaña en Estados Unidos.
La historia de esta iniciativa
En diálogo con ZENIT, Peterson contó que todo comenzó hace 13 años fue a un retiro espiritual que cambió su vida. Aunque se decía católico practicante, confiesa que tenía otras prioridades antes que la vivencia de la fe. Como resolución en este retiro, quiso frecuentar más los sacramentos, asistir diariamente a misa y acercarse más a las Sagradas Escrituras. Luego, dice que tuvo dos sueños: uno con un bebé que estaba siendo asfixiado con una almohada y otro con la promoción de anuncios para la evangelización católica “Ambos sueños pueden hacerse ahora realidad: medios virtuales y nuestro apostolado pro vida”, cuenta Peterson.
En 1997 recibió una llamada de la diócesis de Phoenix (Arizona): “me dijeron: – El Santo Padre Juan Pablo II, para la nueva evangelización, quisiera invitar a católicos inactivos a regresar a la Iglesia por el Jubileo. ¿Nos podrías ayudar? – ”, cuenta Peterson. A esta llamada respondió prontamente. Entendió que se trataba de su sueño hecho realidad y de la llamada que recibió en el retiro: “usar los talentos que Dios me dio, no para mi propio beneficio sino para la Iglesia”. Así comenzó Catholics come home.
Empezaron a lanzar al aire los primeros anuncios publicitarios, y una semana y media después, 3.000 personas volvieron a la Iglesia. Así, Peterson se dio cuenta que debería dedicar más horas a esta campaña: “lo creamos como un apostolado laico de tiempo completo, dando cumplimiento al Magisterio de la Iglesia”, dijo a ZENIT. Buscaron asesores de todos los tipos: "muchos clérigos, expertos en negocios, teólogos laicos, conocidos autores católicos, conferencistas que nos aconsejaron y nos ayudaron a estar seguros de que nuestra publicidad tenía que enseñar algo”, puntualizó Peterson.
Diseñaron así anuncios publicitarios de tres tipos, donde promovían la fe católica: los llamados Épicos, “que muestran la universalidad de la Iglesia en el mundo”, dice Peterson; avisos tipo películas “que invitan a la gente a profundizar en la relación con Jesús y que hablan acerca de la Divina Misericordia”, y otros tipo testimonios de personas que estaban alejadas y que han regresado a la Iglesia católica.
Una campaña que cambia vidas
Son muchas las historias de personas que se convierten o se acercan a la fe católica y de las que Peterson ha sido testigo. En diálogo con ZENIT compartió la historia de algunos de ellos. El primero es un joven llamado Harrison. “Se inscribió en una universidad protestante, pero no profundizó mucho en esta fe, cuando visitó nuestra página dijo: – Esto es exactamente lo que buscaba –. Un año después se convirtió al catolicismo, y ahora se ha inscrito en la universidad católica Ave María en Florida”, dijo el fundador de Catholics come home.
Tom Peterson también contó la historia de un hombre llamado Adrian que vive en Colorado: “Nació en una familia católica pero no creció en esta fe. Dejó su credo y se convirtió en ateo”.“Su mujer y sus hijos también lo eran”, dice Peterson. Cuando Adrián visitó la página web de esta campaña, quiso ver uno de los anuncios Épicos. “Vio la historia, la espiritualidad y los alcances de la Iglesia católica y vio que todo esto tenía sentido”, asegura Tom. Adrián regresó a la Iglesia católica. Su mujer y sus hijos también se hicieron católicos.
Según las estadísticas, cerca de un millón de personas de 80 países diferentes ha entrado a la página de esta campaña. “Normalmente esperamos que visiten estos anuncios publicitarios personas, por ejemplo, de Italia o Irlanda, porque son países católicos, pero que nos vean personas de Qatar – península arábiga – o de otros países tradicionalmente no católicos, esto me parece milagroso”, dice Peterson. En cuanto a los mensajes de televisión, normalmente se transmiten durante seis semanas en una diócesis determinada, Peterson contó que actualmente tienen en inglés cerca de 25 anuncios diferentes. Las campañas se intensifican en épocas como Adviento, Navidad y Cuaresma. “Hay muchas discusiones de personas que por ejemplo hablan en los salones de belleza, en los bares, en sus lugares de trabajo, todo el mundo tiene que haber visto más o menos uno de los anuncios de Catholics come home y hablan de ello”, dice Peterson. Quienes trabajan en esta campaña han realizado estudios con grupos focales sobre el impacto de estos mensajes: Investigan la percepción de la Iglesia antes y después de ver los comerciales. El 76% de los encuestados creen que el mensaje es muy positivo y el 53% aseguran que considerarían regresar a la fe católica luego de ver estos anuncios.
Una campaña que crece cada día
Asesores y técnicos actualizan constantemente la página web. Buscan ser más interactivos e implementar una tecnología cada vez mejor. También adaptar y enriquecer las enseñanzas de esta campaña: “Por ejemplo, temas sobre la infertilidad, enseñanzas sobre la contracepción, el aborto y la vida, matrimonio y familia, anulaciones matrimoniales entre otros temas”, dice Peterson. También están trabajando en la implementación de la página web en español y de los mensajes en polaco. No sólo traduciendo el material sino adaptándolo a las respectivas culturas. Así, Peterson está convencido de vivir cada vez más las enseñanzas de Juan Pablo II en la exhortación apostólica post sinodal Christi Fidelis Laici: “Cuando nosotros combinamos el saber y la experiencia con los talentos que Dios nos dio en un mundo secular, con la fe y la oración y dejándonos guiar por el Espíritu Santo, nacen frutos milagrosos como este tipo de apostolado y estos resultados”, concluye Peterson.Por Andrea Kirk Assaf, traducción del inglés por Carmen Elena Villa

domingo, 2 de mayo de 2010

El caso del fundador de los Legionarios de Cristo, o como los cristianos podemos ser engañados por nuestros propios pastores

COMENTARIO BLOGUERIL

Al leer en el comunicado de la Santa Sede las palabras: “Sistema de poder”, me genera un gran temor que en los diversos movimientos de la Iglesia se pueda repetir el terrible caso del fundador de los Legionarios de Cristo. Seamos sinceros: el hecho del carisma fundacional nos ciega, el cariño a los fundadores y pastores nos puede alejar de la VERDAD. Es algo terrible, por lo que siempre debemos estar alertas, y concientes de la humanidad de nuestros líderes. No olvidemos jamás este caso, ni tantos otros. No caigamos en la ingenuidad, y muchos menos en el ocultar el pecado por creer que esto protegerá a la Iglesia. El espíritu sectario siempre nos acecha, debemos estar siempre alertas como lo estamos contra todo pecado, porque este es otro pecado, quizás uno de los más graves. Las pocas ocasiones que ha tratado legionarios me han parecido gente muy buena, un poco “acartonadas”, pero muy buenos; no tengo yo por qué establecer su estilo de vestir o tratar a los demás. En todo caso, reitero la idea de que un movimiento de la Iglesia bueno (que santifica a muchos) puede ser fundado por una persona de doble vida nada santa. Parece imposible pero ha pasado. Pero... ¡NUNCA MÁS!.


Comunicado de la Santa Sede sobre los Legionarios de Cristo
Al final de la visita apostólica
CIUDAD DEL VATICANO, sábado, 1 de mayo de 2010 (ZENIT.org).- Publicamos el comunicado que ha emitido la Santa Sede este sábado sobre los Legionarios de Cristo tras las reuniones mantenidas entre el 30 de abril y el 1 de mayo en el Vaticano por los cinco visitadores apostólicos.

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1. En los días 30 de abril y 1 de mayo, el cardenal secretario de Estado ha presidido en el Vaticano una reunión con los cinco obispos encargados de la visita apostólica a la congregación de los Legionarios de Cristo (monseñor Ricardo Blázquez Pérez, arzobispo de Valladolid: monseñor Charles Chaput, O.F.M.Cap, arzobispo de Denver; monseñor Ricardo Ezzati Andrello, SDB, arzobispo de Concepción; monseñor Giuseppe Versaldi, obispo de Alessandria; monseñor Ricardo Watty Urquidi, M.Sp.S., obispo de Tepic). En ella han participado los prefectos de la Congregación para la Doctrina de la Fe y de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, y el sustituto para los Asuntos Generales de la Secretaría de Estado.
Una de las sesiones se ha desarrollado en presencia del Santo Padre, a quien los visitadores han presentado una síntesis de sus relaciones, ya enviadas anteriormente.
Durante la visita, han sido entrevistados personalmente más de mil Legionarios y han sido analizados varios centenares de testimonios escritos. Los visitadores han visitado casi todas las casas religiosas y muchas obras de apostolado dirigidas por la congregación. Han escuchado de palabra o leído por escrito el juicio de muchos obispos diocesanos de los países en los cuales trabaja la congregación. Los visitadores también han hablado con numerosos miembros del Movimiento "Regnum Christi", aunque éste no era objetivo de la visita, en particular hombres y mujeres consagrados. Han recibido también una notable correspondencia por parte de laicos comprometidos y de familiares de miembros del Movimiento.
Los cinco visitadores han dado testimonio de la acogida sincera que se les ha dispensado y el espíritu de colaboración activa mostrado por la congregación y por los diferentes religiosos. Aunque actuaron independientemente, han llegado a una valoración ampliamente convergente y a un juicio compartido. Han atestiguado que han encontrado un gran número de religiosos ejemplares, honestos, llenos de talento, muchos de los cuales jóvenes, que buscan a Cristo con celo auténtico y que ofrecen toda su existencia a la difusión del Reino de Dios.
2. La visita apostólica ha podido comprobar que la conducta del padre Marcial Maciel Degollado ha causado consecuencias serias en la vida y en la estructura de la Legión, hasta el punto de que requiere un camino de profunda revisión.
Los gravísimos y objetivamente inmorales comportamientos del padre Maciel, confirmados por testimonios incontrovertibles, representan, en algunos casos, auténticos delitos y manifiestan una vida sin escrúpulos ni auténtico sentimiento religioso. Esta vida era desconocida para gran parte de los Legionarios, sobre todo por el sistema de relaciones entretejido por el padre Maciel, quien hábilmente había sabido crearse pretextos, ganarse la confianza, amistad y silencio de los que le rodeaban y reforzar su propio papel de fundador carismático.
En ocasiones, un lamentable descrédito y alejamiento de cuantos dudaban de su recto comportamiento, así como la errada convicción de no querer dañar el bien que la Legión estaba realizando, habían creado a su alrededor un mecanismo de defensa que le permitió ser inatacable durante mucho tiempo, haciendo que, por consiguiente, fuera muy difícil conocer su verdadera vida.
3. El celo sincero de la mayoría de los Legionarios, que ha emergido también en las visitas a las casas de la congregación y a muchas de sus obras, apreciadas por numerosas personas, ha llevado a muchos en el pasado a retener que las acusaciones, que iban siendo cada vez más insistentes y se iban multiplicando, no podían ser más que calumnias.
Por lo tanto, el descubrimiento y el conocimiento de la verdad acerca de su fundador ha provocado en los miembros de la Legión una sorpresa, desconcierto y profundo dolor, que los visitadores han evidenciado de diferentes maneras.
4. De los resultados de la visita apostólica han surgido con claridad estos elementos entre otros:
a) La necesidad de redefinir el carisma de la congregación de los Legionarios de Cristo, preservando el núcleo verdadero, el de la "militia Christi", que caracteriza la acción apostólica y misionera de la Iglesia y que no se identifica con la eficiencia a toda costa;
b) La necesidad de revisar el ejercicio de la autoridad, que debe estar unida a la verdad, para respetar la conciencia y desarrollarse a la luz del Evangelio como auténtico servicio eclesial;
c) La necesidad de preservar el entusiasmo de la fe de los jóvenes, el celo misionero, el dinamismo apostólico, por medio de una adecuada formación. De hecho, la desilusión sobre el fundador podría cuestionar la vocación y ese núcleo de carisma que pertenece a los Legionarios de Cristo y es propio de ellos.
5. El Santo Padre quiere asegurar a todos los Legionarios de Cristo y a los miembros del "Regnum Christi" que no se quedarán solos: la Iglesia tiene la firme voluntad de acompañarles y de ayudarles en el camino de purificación que les espera. Éste comportará también un encuentro sincero con cuantos, dentro y fuera de la Legión, han sido víctimas de los abusos sexuales y del sistema de poder aplicado por el fundador: a ellos se dirige en este momento el pensamiento y la oración del Santo Padre, junto con la gratitud hacia quienes, a pesar de grandes dificultades, han tenido la valentía y la constancia para exigir la verdad.
6. El Santo Padre, agradeciendo a los visitadores por el delicado trabajo que han desarrollado con competencia, generosidad y profunda sensibilidad pastoral, se ha reservado la facultad para indicar próximamente las modalidades de este acompañamiento, comenzando por el nombramiento de su delegado y de una comisión de estudio de las constituciones.
A los miembros consagrados del Movimiento "Regnum Christi", que lo han pedido con insistencia, el Santo Padre enviará un visitador.
7. Por último, el Papa renueva a todos los Legionarios de Cristo, a sus familias, a los laicos comprometidos en el Movimiento "Regnum Christi", su aliento en este momento difícil para la congregación y para cada uno de ellos. Les exhorta a no perder de vista que su vocación, surgida del llamamiento de Cristo y animada por el ideal de testimoniar al mundo su amor, es un auténtico don de Dios, una riqueza para la Iglesia, el fundamento indestructible sobre el cual construir el futuro personal y el de la Legión.
[Traducción del original italiano realizada por ZENIT]

domingo, 25 de abril de 2010

Karol Wojtyla: doctorado en Roma (1946-1948). Leyendo la biografía de Juan Pablo II de Weigel (XI)


Se hospedó en el Colegio Belga donde se discutía sobre la nouvelle theologue, la nueva teología asociada a los dominicos Marie-Dminique Chenu e Yves Congar y los jesuitas Jean Daniélou y Henri de Lubac, que influyeron luego en el Concilio Vaticano II. También había debates sobre los experimentos de sacerdotes obreros que se llevaban a cabo en Francia y Bélgica. La experimentación pastoral en Francia estaba en auge. En el ambiente políglota pudo mejorar su francés, practicar el alemán, e iniciaba sus estudios de italiano e inglés.
(…) Viajó por Italia y se confesó con el Padre Pío y lo vio celebrar la misa, lo cual le generó gran impresión.
(…) Viajó por Europa, y en Holanda se admiró de su sólida estructura organizacional con activas comunidades eclesiales vivas.
(…) En Ars con el ejemplo del santo Cura Vianney se quedó convencido de que el sacramento de la penitencia constituía una parte indispensable del drama de una vida cristiana, Karol se propuso convertirse en un “prisionero del confesionario”. Se trataba de una convicción fortalecida por su observación del abismo cada vez mayor entre la Europa de catedrales góticas a través de la que viajaba y la Europa descristianizada que estaba emergiendo, ya fuera libremente o por decreto comunista, al terminar la guerra. Estaba convencido de que aquel abismo sólo podía llenarse mediante nuevas formas de pastoral abiertas a una presencia más amplia del laicado. (
Weigel, George; 1999, Biografía de Juan Pablo II. Testigo de la esperanza, Pp. 123-125).

sábado, 24 de abril de 2010

Influencias en la juventud de Karol Wojtyla: siendo seminarista. Leyendo la biografía de Juan Pablo II de Weigel (X)

Biografìa de Juan Pablo II. Testigo de Esperanza de George Weigel.

Cuando era seminarista la metafísica le permitió:
El descubrimiento de las profundas razones por las que hasta entonces había tan sólo vivido y sentido… Lo que la intuición y la sensibilidad me habían ilustrado hasta entonces acerca del mundo encontró sólida confirmación.
Aristóteles y Santo Tomás de Aquino le confirmó que el mundo era inteligible. La guerra le había dado una experiencia real aunque cruel. Asumió el realismo (la inteligibilidad del mundo) en contra del escepticismo radical y de su pariente cercano, el relativismo moral.

Su compromiso personal a vivir en pobreza seguía causando impresión en sus compañeros del seminario. Entregó un jersey nuevo que le dieron a un mendigo que preguntó por Karol Wojtyla.
(…) Poco después de la guerra, Karol cobró conciencia del autosacrificio del padre Maximilian Kolbe al dar su vida por un hombre casado y con hijos en Auschwitz (…), se convirtió en un modelo del sacerdote como hombre que vive su vocación como un alter Christus, mediante el completo verterse al servicio de su gente. (…) La idea de autoofrenda surgiría una y otra vez en el trabajo de toda su vida, y se convertiría en uno de los conceptos cruciales de su filosofía del ser humano y el medio moral humano.
El 01 de noviembre de 1946 fue ordenado sacerdote por el Cardenal Sapieha en la capilla privada del Arzobispo en Franciszkanska
(Weigel, George; 1999, Biografía de Juan Pablo II. Testigo de la esperanza, Pp. 107, 117-118).

miércoles, 7 de abril de 2010

EEUU: el país más caritativo, y es por las personas religiosas, no por las laicas

Posted: Wednesday, April 7, 2010
THE CATHOLIC DIFFERENCE

Almsgiving, along with fasting and intensified prayer, is one of the three traditional Lenten practices enjoined on all Catholics by ancient tradition. So it might sem an odd moment to reflect briefly on just how much almsgiving Americans already do. But perhaps a review of some remarkable data will spur those who are already in the game to do better in our charitable giving -- and encourage those who aren't yet giving to do so.
A few months back, my friend Adam Meyerson, president of the Philanthropy Roundtable, gave a lecture on "The Generosity of America" at Michigan's Hillsdale College (itself entirely supported by tuition and philanthropy, as it accepts no government money whatsoever). Adam began by noting that the media generally notice Americans' charitable donations only in the wake of disasters; it was widely remarked, for example, that some $6 billion had been given to disaster relief in the immediate aftermath of Hurricane Katrina. Yet, admirable as that giving was, Americans routinely give about $6 billion to charity every week, Meyerson noted: "Last year [2009], Americans gave $300 billion to charity. To put this into perspective, that is almost twice as much as we spent on consumer electronics equipment -- equipment including cell phones, iPods, and DVD players. Americans gave three times as much to charity last year as we spent on gambling and ten times as much as we spent on professional sports."
All of which makes us, Meyerson concluded, "the most charitable country in the world. There is no other country that comes close." The interesting question is, why?
The first reason why has to do with American piety. Secularism may have made serious inroads into American high culture and American public life, but we are not yet Europe or Canada, and it tells in our giving: "Americans who attend church or synagogue or another form of worship once a week give three times as much to charity as a percentage of their income as do those who rarely attend religious services." And while it is true that $100 billion of that annual $300 billion in charitable giving goes to religious institutions, 2/3 of it goes to other forms of charitable activity, usually secular in character. Moreover, Meyerson, noted, regular worshippers "also give more to secular charities than do those who never or rarely attend religious services." Secularism's claims to a deeper compassion for those in need are put into serious question by this data.
Americans are also not -- yet -- infected with the European tendency to look toward government for the resolution of all their problems. As Meyerson put it, Americans "respect the freedom and the ability of individuals, and associations of individuals, to make a difference. Americans don't wait for government or the local nobleman to solve our problems; we find solutions ourselves." And we help support those who are finding those solutions through charitable giving.
The culture of philanthropy that has traditionally been a part of wealth-creation in America is another facet of this striking picture of generosity, from Andrew Carnegies's libraries to James J. Hill's donation of the Catholic seminary in St. Paul to the Gates Foundation's work to eradicate malaria. That this extraordinary generosity -- and its microcosmic counterparts in the giving that ordinary Americans do -- is facilitated by tax laws that make charitable giving economically beneficial to the donors simply suggests that, for once, there's a part of the tax code of which we can be proud.
This Lent, however, Catholics still have reason for some examination of conscience on their almsgiving. We're traditionally far behind our Protestant brethren in the percentage of our income we give back to God; and, one expects, we're also a bit behind the curve on giving to secular charities, too. The "one-third, one-third, one-third rule" still applies in too many Catholic parishes: one-third of a parish's families carry the bulk of the parish's financial burden, one-third do a little, and one-third do nothing. That can, and should, change, even in economically difficult times.
George Weigel is Distinguished Senior Fellow and William E. Simon Chair in Catholic Studies at the Ethics and Public Policy Center in Washington, D.C.

martes, 6 de abril de 2010

Benedicto XVI: Homilía en la Vigilia Pascual (mis extractos y comentarios)

El ser revestido con los nuevos indumentos de Dios, es lo que sucede en el Bautismo; así nos dice la fe cristiana. Naturalmente, este cambio de vestidura es un proceso que dura toda la vida. Lo que ocurre en el Bautismo es el comienzo de un camino que abarca toda nuestra existencia, que nos hace capaces de eternidad, de manera que con el vestido de luz de Cristo podamos comparecer en presencia de Dios y vivir por siempre con él.
En el rito del Bautismo hay dos elementos en los que se expresa este acontecimiento, y en los que se pone también de manifiesto su necesidad para el transcurso de nuestra vida. Ante todo, tenemos el rito de las renuncias y promesas. (…) Se pronuncia un triple "no": al demonio, a sus pompas y al pecado. Con esta extraña palabra, "pompas", es decir, la suntuosidad del diablo, se indicaba el esplendor del antiguo culto de los dioses y del antiguo teatro, en el que se sentía gusto viendo a personas vivas desgarradas por bestias feroces. Se rechazaba de esta forma un tipo de cultura que encadenaba al hombre a la adoración del poder, al mundo de la codicia, a la mentira, a la crueldad. Era un acto de liberación respecto a la imposición de una forma de vida, que se presentaba como placer y que, sin embargo, impulsaba a la destrucción de lo mejor que tiene el hombre. (…) Pablo las llama (a las “viejas vestiduras” “obras de la carne”: "fornicación, impureza, libertinaje, idolatría, hechicería, enemistades, contiendas, celos, rencores, rivalidades, partidismo, sectarismo, envidias, borracheras, orgías y cosas por el estilo" (Ga 5,19ss.).
(…) El bautizando determina la nueva orientación de su vida: la fe en el Dios trinitario al que él se entrega. Así, Dios mismo nos viste con indumentos de luz, con el vestido de la vida. Pablo llama a estas nuevas "vestiduras" "fruto del Espíritu" y las describe con las siguientes palabras: "Amor, alegría, paz, comprensión, servicialidad, bondad, lealtad, amabilidad, dominio de sí" (Ga 5, 22).
(Benedicto XVI, Homilía de la Vigilia Pascual, 03-IV-2010).

Señor, dame esas vestiduras, dame la Gracia para ser bueno, y abandonar mis vicios. No quiero pecar más, quiero la fe y la fuerza para amar la cruz diaria, para donarme total y alegremente. Quiero renunciar al poder, a la codicia… a la vanidad. Quiero la humildad, el sentirme nada, para no centrarme en mí, sino en los demás.

domingo, 4 de abril de 2010

Benedicto XVI: Homilía en la misa de la Cena del Señor (mis extractos y comentarios)

Al final, las palabras de Jesús se convierten en oración, en su Oración sacerdotal, en cuyo trasfondo, según los exegetas, se halla el ritual de la fiesta judía de la expiación. El sentido de aquella fiesta y de sus ritos -la purificación del mundo, su reconciliación con Dios-, se cumple en el rezar de Jesús, un rezar en el que, al mismo tiempo, se anticipa la pasión, y la transforma en oración.
(…) ¿Qué es realmente esta vida verdaderamente eterna, a la que la muerte no puede dañar? Hemos escuchado la respuesta de Jesús: Esta es la vida verdadera, que te conozcan a ti, Dios, y a tu enviado, Jesucristo. Para nuestra sorpresa, allí se nos dice que vida es conocimiento. Esto significa, ante todo, que vida es relación. Nadie recibe la vida de sí mismo ni sólo para sí mismo. La recibimos de otro, en la relación con otro. Si es una relación en la verdad y en el amor, un dar y recibir, entonces da plenitud a la vida, la hace bella.
(…) Conocer, según la sagrada escritura, es llegar a ser interiormente una sola cosa con el otro. Conocer a Dios, conocer a Cristo, siempre significa también amarlo, llegar a ser de algún modo una sola cosa con él en virtud del conocer y del amar. Nuestra vida, pues, llega a ser una vida auténtica, verdadera y también eterna, si conocemos a Aquel que es la fuente de la existencia y de la vida. De este modo, la palabra de Jesús se convierte para nosotros en una invitación: seamos amigos de Jesús, intentemos conocerlo cada vez más. Vivamos en diálogo con él. Aprendamos de él la vida recta, seamos sus testigos. Entonces seremos personas que aman y actúan de modo justo. Entonces viviremos de verdad.
(…) El Señor pide la Iglesia al Padre. Ella nace de la oración de Jesús y mediante el anuncio de los apóstoles, que dan a conocer el nombre de Dios e introducen a los hombres en la comunión de amor con Dios. Jesús pide, pues, que el anuncio de los discípulos continúe a través de los tiempos; que dicho anuncio reúna a los hombres que, gracias a este anuncio, reconozcan a Dios y a su Enviado, el Hijo Jesucristo. Reza para que los hombres sean llevados a la fe y, mediante la fe, al amor. Pide al Padre que estos creyentes "lo sean en nosotros" (Juan 17, 21); es decir, que vivan en la íntima comunión con Dios y con Jesucristo y que, a partir de este estar en comunión con Dios, se cree la unidad visible.
(Benedicto XVI, Homilía en la misa de la Cena del Señor, 01-IV-2010).

No podemos reducir la vida cristiana a una carrera por las virtudes, a menos que esa lucha la haga por la Caridad, por la relación con el Dios Amor. Por ello, la vida de oración es lo fundamental, pero siempre con efectos claros en nuestro obrar, y ahí la importancia de las virtudes. Pienso en la Eucaristía, ¡Qué mejor forma de estar unido a Ti!; y luego hacer Eucaristía toda nuestra vida, todo nuestro obrar. Hacernos sacramento, mostrar a Dios a través de nuestras vidas. Esa es la forma, y a la vez debe ser nuestra preocupación: ¿Cuándo me ven, ven a un verdadero cristiano?. En mi caso creo que no.

Amar, amar, amar. Sólo eso. Y para amar hay que ser manso, paciente, casto, laborioso, generoso, desprendido, humilde, optimista, y alegre. Llevar la alegría a los demás, escuchar a los demás, ayudar a los demás. Pero Cristo no los ha pedido dentro y con su Iglesia, que no dividamos, sino que unamos; y que esto sea visible. Que lo anunciemos con la unidad en la palabra, la fe y la caridad.

viernes, 2 de abril de 2010

Benedicto XVI nos habla del significado del Santo Crisma

Homilía de nuestro Papa en la misa crismal de ayer, ver aquí. Ahora nuestros extractos.

El sacramento es el centro del culto de la Iglesia. Sacramento significa, en primer lugar, que no somos los hombres los que hacemos algo, sino que es Dios el que se anticipa y viene a nuestro encuentro con su actuar, nos mira y nos conduce hacia él. Pero hay algo todavía más singular: Dios nos toca por medio de realidades materiales, a través de dones de la creación, que él toma a su servicio, convirtiéndolos en instrumentos del encuentro entre nosotros y él mismo.
(…) Ya desde la antigüedad, en la etimología popular se ha unido la palabra griega "elaion", aceite, con la palabra "eleos", misericordia. De hecho, en varios sacramentos, el óleo consagrado es siempre signo de la misericordia de Dios. Por tanto, la unción para el sacerdocio significa también el encargo de llevar la misericordia de Dios a los hombres. En la lámpara de nuestra vida nunca debería faltar el óleo de la misericordia. Obtengámoslo oportunamente del Señor, en el encuentro con su Palabra, al recibir los sacramentos, permaneciendo junto a él en oración.
(…) Él mismo lleva, por así decir, el ramo de olivo, introduce su paz en el mundo. Anuncia la bondad salvadora de Dios. Él es nuestra paz. Los cristianos deberían ser, pues, personas de paz, personas que reconocen y viven el misterio de la cruz como misterio de reconciliación. Cristo no triunfa por medio de la espada, sino por medio de la cruz. Vence superando el odio. Vence mediante la fuerza más grande de su amor. La cruz de Cristo expresa su "no" a la violencia.
(…) Consiste en que los cristianos, como buenos ciudadanos, respetan el derecho y hacen lo que es justo y bueno. Consiste en que rechazan lo que en los ordenamientos jurídicos vigentes no es derecho, sino injusticia. La lucha de los mártires consistía en su "no" concreto a la injusticia
(…) El aceite de júbilo, que ha sido derramado sobre Cristo y por él llega a nosotros, es el Espíritu Santo, el don del Amor que nos da la alegría de vivir. Ya que conocemos a Cristo y, en Cristo, a Dios, sabemos que es algo bueno ser hombre. Es algo bueno vivir, porque somos amados. Porque la verdad misma es buena.
(…) Quien ama está siempre dispuesto a sufrir por el amado y a causa de su amor y, precisamente así, experimenta una alegría más profunda. La alegría de los mártires era más grande que los tormentos que les infligían. Este gozo, al final, ha vencido y ha abierto a Cristo las puertas de la historia.

(Benedicto XVI, Homilía en la misa crismal, 01-IV-2010).

He tratado de extraer lo mejor de esta hermosa homilía sobre el significado del sacramento (Dios nos busca y nos lleva hacia Él por medio de la creación) relacionado con el uso del aceite crismal que se bendice el Jueves Santo. El mayor de ellos es ser partícipes y medios de la misericordia de Dios (“en la etimología popular se ha unido la palabra griega "elaion", aceite, con la palabra "eleos", misericordia”). ¡¿Qué mayor misericordia que darnos la Paz?!. Es así como el Papa nos explica otro simbolismo del aceite: la rama de olivo que significa la paz con Dios, la paz entre los hombres, la paz de la vida. Y Cristo nos trae la paz al reconciliarnos NO POR MEDIO DE LA ESPADA SINO POR LA CRUZ. Este es el gran significado del Viernes Santo, de la Pasión. Nos trae la paz, y una paz justa, jamás impuesta (la cruz es el triunfo de la no violencia), es la paz del amor y la misericordia.

jueves, 1 de abril de 2010

¿Aburrirse en Misa?

Extracto de la entrevista de ZENIT al Prelado del Opus Dei: Monseñor Javier Echevarría, 31-03-10, La misa, una cuestión de amor.
-¿Qué recomendaría a los católicos que dicen que se “aburren” en misa?
Monseñor Echevarría: Yo les recomendaría que participaran con sinceridad en la misa, buscando y amando a Jesús. Escribió san Josemaría en Camino: “La Misa es larga, dices, y añado yo: porque tu amor es corto”.
No hay que dar demasiada importancia al sentimiento: entusiasmo o apatía, ganas o desgana. La misa es sacrificio: Cristo se entrega por amor. Es una acción de Dios, y no podemos captar plenamente su grandeza, por nuestra condición limitada de criaturas. Pero hemos de hacer el esfuerzo no sólo de estar en misa, sino de vivir la misa en unión con Cristo y con la Iglesia
(…) En la misa no sólo se cumple una comunicación descendente del don redentor de Dios, sino también una mediación ascendente, ofrecimiento del hombre a Dios: su trabajo y sus padecimientos, sus penas y sus alegrías, todo eso unido a Cristo: por Él, con Él y en Él.

Señor, has que ame la misa, y que entienda que las oportunidades de ir a misa entre semana, debo aprovecharlas. Que entienda que es la mejor forma de hacer oración. Que la viva intensamente, que comprenda cada parte, especialmente con la memoria reviva los momentos de Tu vida que realiza la misa. En especial, internalizar que es un SACRIFICIO POR AMOR.

lunes, 29 de marzo de 2010

Ser sal de la tierra. La confianza


En la Venezuela de los ochenta, cuando era adolescente, comenzaba la decadencia de la confianza en el país, o por lo menos en Caracas. Es así como me pasó lo siguiente en una cola del teatro Teresa Carreño para comprar entradas a un evento. Una persona (totalmente desconocida) estaba conmigo en la cola, y esta tuvo que ir a arreglar algo y me pidió que le comprara la entrada dándome el dinero. Yo le dije que en los tiempos que corrían no se podía confiar en nadie, que yo podría ser una deshonesto y robarle el dinero. La persona me respondió: "En todo tiempo siempre hay que confiar en las personas; no podemos vivir con la total desconfianza". Me causó gran impresión. En medio de la decadencia, todavía algunos tenían esperanzas en la bondad humana.
Considero que debemos ir creando islas de confianza que extiendan este bien como sal o levadura del bien.

domingo, 28 de marzo de 2010

Homilía del Domingo de Ramos (padre Rui Pestana, ofm)

Hoy domingo de Ramos (28 de marzo de 2010) se lee La Pasión de Nuestro Señor (Lucas 22, 14-23, 56), y yo fuí a misa en el templo Nuestra Señora de la Chiquínquira en Caracas, donde el padre Rui Pestana, ofm; nos dijo en resumen lo siguiente.

Hoy recordamos dos hechos: el recibimiento de Jesús como rey, para luego, esa misma gente, pedir su crucifixión a los cinco días. Así es nuestra doble moral. Un día lo coronamos, al otro lo crucificamos. Todos los días lo hacemos. Si nos preguntáramos donde estaríamos en la Pasión, si fuéramos sinceros diríamos que frente a la cruz contemplando su dolor sin hacer nada.

Algunos se preguntatán ¿Por qué Dios Padre no envío sus ejércitos y mató a todos los que crucificaron a Cristo? Seguramente nosotros lo haríamos. Pero Dios no es así, porque precisamente Dios en la Cruz quiere que todos nosotros nos salvemos, los buenos y los malos, María y Poncio Pilatos, los apóstoles, y también los romanos, y los fariseos. Cristo no es como nosotros: ojo por ojo, diente por diente. No, él ama tanto que quiere salvarnos a todos. Debemos ser como él, buenos.

Se preguntarán ¿Quién es bueno, quién es malo?. Bueno es el que quiere que todos se salven, que NO DIVIDE. Malo es el que divide, que sólo quiere la salvación para unos pocos. Cristo es paciente, espera... Un buen propósito para este año es que seamos buenos, que lo sigamos en su pasión. Sin buscar la condena de los demás.

No fueron las mismas palabras, pero si la idea principal.
¡Qué difícil es ser como Cristo!. Pero al menos, hay que luchar por esta meta, aunque caigamos mil veces.

sábado, 27 de marzo de 2010

Un documento para la historia de la Iglesia: Legionarios de Cristo aceptan los terribles pecados de su fundador

Permalink: http://www.zenit.org/article-34795?l=spanish
Comunicado sobre la situación de la Legión de Cristo y del Regnum Christi
Emitido por el Consejo General y los directores territoriales de la congregación
ROMA, viernes, 26 de marzo de 2010 (
ZENIT.org).- Publicamos el comunicado sobre las presentes circunstancias de la Legión de Cristo y del Movimiento Regnum Christi, que han emitido el Consejo General y los directores territoriales de la congregación religiosa el 25 de marzo al final de su reunión anual celebrada en Roma.

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25 de marzo de 2010
Solemnidad de la Anunciación del Señor
Introducción
Con ocasión de la reunión anual de los directores territoriales con el director general y su consejo, queremos dirigirnos a nuestros hermanos legionarios de Cristo, a los consagrados y a los miembros del Movimiento Regnum Christi, familiares y amigos que nos acompañan en este momento de nuestra historia, así como a todos aquellos que han sido afectados, heridos o escandalizados por las acciones reprobables de nuestro fundador, el P. Marcial Maciel Degollado, L.C.
Nos ha llevado tiempo asimilar estos hechos de su vida. Para muchos -sobre todo para las víctimas- este tiempo ha sido demasiado largo y doloroso.
En ocasiones no hemos podido o sabido salir al paso de todos como hubiera sido necesario y como, de hecho, era nuestro deseo. Por eso sentimos la necesidad de emitir este comunicado.
Acerca de algunos hechos de la vida de nuestro fundador, el P. Marcial Maciel, L.C. (1920-2008)
Habíamos pensado y esperado que las acusaciones presentadas contra nuestro fundador fuesen falsas e infundadas, pues no correspondían a la experiencia que teníamos de su persona y de su obra. Sin embargo, el 19 de mayo de 2006 fue emitida una comunicación de la Sala de Prensa de la Santa Sede como conclusión de la investigación canónica que la Congregación para la Doctrina de la Fe (CDF) había iniciado en el año 2004. En ese entonces, la CDF llegó a una certeza moral suficiente para imponer sanciones canónicas graves, correspondientes a las acusaciones hechas en contra del P. Maciel, entre las cuales se incluían actos de abuso sexual a seminaristas menores. Por lo tanto, profundamente consternados, debemos decir que estos hechos sucedieron.
En efecto, «la Congregación para la Doctrina de la Fe, [...] decidió -teniendo en cuenta tanto la edad avanzada del padre Maciel, como su delicada salud- renunciar a un proceso canónico e invitar al padre a una vida reservada de oración y de penitencia, renunciando a todo ministerio público. El Santo Padre aprobó estas decisiones» (Comunicado de la Sala de Prensa de la Santa Sede, 19 de mayo de 2006).
Posteriormente, supimos que había tenido una hija en el contexto de una relación prolongada y estable con una mujer y otras conductas graves. Más adelante aparecieron otras dos personas, hermanos entre sí, que afirman ser hijos suyos, fruto de la relación con otra mujer.
Reprobamos estos y todos los actos contrarios a los deberes de cristiano, religioso y sacerdote en la vida del P. Maciel, y afirmamos que no corresponden a lo que nos esforzamos por vivir en la Legión de Cristo y en el Movimiento Regnum Christi.
La Legión de Cristo y el Movimiento Regnum Christi ante estos hechos
Expresamos, una vez más, nuestro dolor y pesar a todas y cada una de las personas que hayan sido dañadas por las acciones de nuestro fundador.
Participamos del sufrimiento que este escándalo ha causado a la Iglesia y nos aflige y apena profundamente.
Queremos pedir perdón a todas aquellas personas que lo acusaron en el pasado y a quienes no se dio crédito o no se supo escuchar, pues en su momento no podíamos imaginarnos estos comportamientos. Si resultase que ha habido alguna colaboración culpable, actuaremos según los principios de la justicia y caridad cristianas, responsabilizando de sus hechos a estas personas.
Asimismo, pedimos perdón a nuestros familiares, amigos, bienhechores y a todas las personas de buena voluntad que hayan sentido que su confianza ha sido herida.
Por otra parte, como miembros del cuerpo místico de Cristo sentimos la necesidad de expiar con espíritu cristiano sus faltas y el escándalo por ellas causado. Para ello, invitamos a quienes forman parte de nuestra familia religiosa a intensificar su oración y sacrificio.
Es también nuestro deber cristiano y sacerdotal seguir saliendo al paso de las personas que han sido afectadas de algún modo. A ellos va nuestra mayor solicitud y les seguimos ofreciendo la ayuda espiritual y pastoral que necesiten. Así, buscamos contribuir a la necesaria reconciliación cristiana. Al mismo tiempo, somos conscientes de que Jesucristo es el único capaz de sanar definitivamente y de «hacer nuevas todas las cosas» (cf. Ap 21, 5).
Dios, en sus misteriosos designios, eligió al P. Maciel como instrumento para fundar la Legión de Cristo y el Movimiento Regnum Christi, y agradecemos a Dios el bien que realizó. A la vez, aceptamos con dolor que, ante la gravedad de sus faltas, no podemos mirar su persona como modelo de vida cristiana o sacerdotal.
Inspirándonos en el ejemplo de Cristo que condena el pecado pero busca salvar al pecador, y convencidos del significado y la belleza del perdón, encomendamos a nuestro fundador al amor misericordioso de Dios.
La Visita Apostólica
Deseamos expresar nuestra gratitud al Santo Padre, el Papa Benedicto XVI, no sólo por renovarnos «su solidaridad y su plegaria en estos momentos delicados» (cf. Carta del Cardenal Tarcisio Bertone, SDB, al P. Álvaro Corcuera, 10 de marzo de 2009), sino también por habernos ofrecido el instrumento de la Visita Apostólica para ayudarnos a «superar las dificultades existentes» (ibid.). Así, esperamos dar los pasos necesarios para consolidar los fundamentos, la formación y la vida cotidiana de los legionarios de Cristo y de los miembros del Movimiento Regnum Christi.
Agradecemos a los cinco visitadores apostólicos, Mons. Ricardo Blázquez, Mons. Charles J. Chaput, OFM Cap., Mons. Ricardo Ezzatti, SDB, Mons. Giuseppe Versaldi y Mons. Ricardo Watty, MSSp, todo el trabajo que han realizado con tanta entrega y solicitud paternas.
Acogeremos con obediencia filial las indicaciones y recomendaciones del Santo Padre que resulten de la Visita Apostólica y nos comprometemos a ponerlas en práctica.
Hacia el futuro
Desde el Capítulo General celebrado en enero de 2005, cuando fue elegido el P. Álvaro Corcuera, L.C. como director general, hemos procurado guiar la Legión de Cristo y el Regnum Christi manteniéndonos fieles a todo lo que hemos recibido de Dios y ha sido aprobado por la Iglesia. Reconocemos con humilde gratitud las bendiciones y frutos que el Señor nos ha concedido hasta ahora y asumimos la responsabilidad de profundizar en la comprensión de nuestra historia, carisma y espiritualidad.
Afrontamos el futuro con esperanza, seguros de que nuestras vidas se apoyan únicamente en Dios. Confiamos plenamente en Él y en la omnipotencia de su amor que, como dice san Pablo, «hace concurrir todas las cosas para el bien de los que le aman» (Rm 8, 28). Sabemos que en este camino contaremos con la asistencia del Espíritu Santo y con la guía materna de la Iglesia.
Nuestro objetivo, como individuos y como institución, es amar a Cristo, vivir su Evangelio y extender por el mundo su Reino de paz y de amor. Somos conscientes de que, para lograr esto, necesitamos una constante renovación, personal y comunitaria, en fidelidad a la tradición de la vida consagrada, con el fin de servir mejor a la Iglesia y a la sociedad. Este último periodo nos ha ayudado a reflexionar sobre nuestra identidad y misión y, al mismo tiempo, nos ha impulsado a revisar, con humildad y sencillez, diversos aspectos de nuestra vida institucional.
Estamos decididos, entre otras cosas, a:
--seguir buscando la reconciliación y el encuentro con quienes han sufrido,
--hacer la verdad sobre nuestra historia,
--continuar ofreciendo seguridad, sobre todo para menores de edad, en nuestras instituciones y actividades, tanto en ambientes como en procedimientos,
--crecer en un espíritu de servicio desinteresado a la Iglesia y a las personas,
--colaborar mejor con todos los pastores y con otras instituciones dentro de la Iglesia,
--mejorar nuestra comunicación,
--seguir velando por la aplicación de los controles y procedimientos administrativos a todos los niveles y seguir actuando un adecuado rendimiento de cuentas,
--redoblar nuestro empeño en la misión de ofrecer el Evangelio de Jesucristo al mayor número posible de hombres,
--y, sobre todo, buscar la santidad de vida con renovado esfuerzo de la mano de la Iglesia.
Conclusión
No podemos terminar este comunicado sin agradecer a los miles de legionarios, consagrados, consagradas y todos los miembros del Regnum Christi que con profunda generosidad han entregado y entregan sus vidas a Dios en el servicio de la Iglesia y de la sociedad, así como a aquellos que colaboran en los centros y obras de apostolado. Gracias a ellos y a su labor, podemos decir que Jesucristo es hoy más conocido y amado en este mundo. Asimismo, expresamos nuestra gratitud a cada una de las personas que, en todo momento, nos han sostenido con su fe, sus oraciones y su sufrimiento, unido al de Cristo.
Firmamos este comunicado hoy, día 25 de marzo, solemnidad de la Anunciación del Señor. Que Él nos conceda, por intercesión de su Madre, la Santísima Virgen María, la gracia de profundizar en el misterio del Amor de Dios hecho hombre y de vivirlo y transmitirlo con renovado fervor.
P. Álvaro Corcuera, L.C., director general
P. Luis Garza, L.C., vicario general
P. Francisco Mateos, L.C., consejero general
P. Michael Ryan, L.C., consejero general
P. Joseph Burtka, L.C., consejero general
P. Evaristo Sada, L.C., secretario general
P. José Cárdenas, L.C., director territorial de Chile y Argentina
P. José Manuel Otaolaurruchi, L.C., director territorial de Venezuela y Colombia
P. Manuel Aromir, L.C., director territorial de Brasil
P. Rodolfo Mayagoitia, L.C., director territorial de México y Centroamérica
P. Leonardo Núñez, L.C., director territorial de Monterrey
P. Scott Reilly, L.C., director territorial de Atlanta
P. Julio Martí, L.C., director territorial de Nueva York
P. Jesús María Delgado, L.C., director territorial de España
P. Jacobo Muñoz, L.C., director territorial de Francia e Irlanda
P. Sylvester Heereman, L.C., director territorial de Alemania y centro Europa

jueves, 25 de marzo de 2010

Benedicto XVI: FRENTE AL ESCÁNDALO DE LOS CURAS PEDERASTAS (y III)

4. (…) Sólo examinando cuidadosamente los numerosos elementos que han dado lugar a la crisis actual es posible efectuar un diagnóstico claro de las causas y encontrar las soluciones eficaces. Ciertamente, entre los factores que han contribuido a ella, podemos enumerar: los procedimientos inadecuados para determinar la idoneidad de los candidatos al sacerdocio y a la vida religiosa, la insuficiente formación humana, moral, intelectual y espiritual en los seminarios y noviciados, la tendencia de la sociedad a favorecer al clero y otras figuras de autoridad y una preocupación fuera de lugar por el buen nombre de la Iglesia y por evitar escándalos cuyo resultado fue la falta de aplicación de las penas canónicas en vigor y de la salvaguardia de la dignidad de cada persona. Es necesaria una acción urgente para contrarrestar estos factores, que han tenido consecuencias tan trágicas para la vida de las víctimas y sus familias y han obscurecido tanto la luz del Evangelio, como no lo habían hecho siglos de persecución.
7. A los sacerdotes y religiosos que han abusado de niños: (…) Al mismo tiempo, la justicia de Dios nos llama a dar cuenta de nuestras acciones sin ocultar nada. Admitid abiertamente vuestra culpa, someteos a las exigencias de la justicia (debéis responder ante Dios Todopoderoso y ante los tribunales debidamente constituidos), pero no desesperéis de la misericordia de Dios.
10. A los sacerdotes y religiosos de Irlanda: (…) Sé que muchos estáis decepcionados, desconcertados y encolerizados por la manera en que algunos de vuestros superiores abordaron esas cuestiones.
11. A mis hermanos, los obispos: No se puede negar que algunos de vosotros y de vuestros predecesores han fracasado, a veces lamentablemente, a la hora de aplicar las normas, codificadas desde hace largo tiempo, del derecho canónico sobre los delitos de abusos de niños.
Les exige:
Además de aplicar plenamente las normas del derecho canónico concernientes a los casos de abusos de niños, seguid cooperando con las autoridades civiles en el ámbito de su competencia. (…) El pueblo de Irlanda, con razón, espera que seáis hombres de Dios, que seáis santos, que viváis con sencillez, y busquéis día tras día la conversión personal.
(Benedicto XVI, Carta pastoral a los católicos de Irlanda, 19-III-2010)

Un diagnóstico muy completo en pocas palabras. El cual ha tocado todas las causas, en especial una gran error que ha hecho un dañó tan inmenso, que el Papa no ha dudado en compararlo y describirlo como que: “han obscurecido tanto la luz del Evangelio, como no lo habían hecho siglos de persecución”.

El problema fue temer la reducción del número de católicos, y muy especialmente el de las vocaciones. Fue así como se abrió la puerta a cualquiera, el sacerdocio perdió su dignidad como forma de vida.

Su respuesta a los sacerdotes pederastas es contudente, y a la vez misericordiosa. Nos demuestra que el cristiano no huye de sus deberes con la justicia: debemos castigar al culpable (y someternos a ella en caso de serlo); pero también, después del castigo y la reparación (e incluso en medio de estos), se les ofrece y recuerda la misericordia.

El Papa reitera en varias ocasiones quiénes fueron los culpables del escándalo: los pederastas y las autoridades que lo ocultaron. Nadie puede negar que Benedicto XVI no está haciendo frente a los verdaderos culpables.

Gracias Señor por darnos un gran Papa.

miércoles, 24 de marzo de 2010

Benedicto XVI: FRENTE AL ESCÁNDALO DE LOS CURAS PEDERASTAS (II)

Es triste ver como en mi país algunas personas por razones mezquinas, siguen el coro anticlerical y católico de cierto laicismo izquierdoso (y ojo que mis hermanos liberales también caen en esto). Esto es más grave cuando son parte de la élite gobernante, ver acá. Claro, puede leer sólo para informarse y comprobar lo que digo, no tiene necesidad de embasurarse.
Sigamos con la lectura del documento papal, y luego nuestros humildes comentarios.
2. Por mi parte, teniendo en cuenta la gravedad de estos delitos y la respuesta a menudo inadecuada que han recibido por parte de las autoridades eclesiásticas de vuestro país, he decidido escribir esta carta pastoral para expresaros mi cercanía, y proponeros un camino de curación, renovación y reparación.
(…) Mientras os enfrentáis a los retos de este momento, os pido que recordéis la "roca de la que fuisteis tallados" (Isaías 51, 1). Reflexionad sobre la generosa y a menudo heroica contribución ofrecida a la Iglesia y a la humanidad por generaciones de hombres y mujeres irlandeses, y haced que de esa reflexión brote el impulso para un honesto examen de conciencia personal y para un sólido programa de renovación de la Iglesia y el individuo.
4. El cambio social ha sido muy veloz y a menudo ha repercutido adversamente en la tradicional adhesión de las personas a las enseñanzas y valores católicos. Asimismo, las prácticas sacramentales y devocionales que sustentan la fe y la hacen crecer, como la confesión frecuente, la oración diaria y los retiros anuales se dejaron, con frecuencia, de lado.
(Benedicto XVI, Carta pastoral a los católicos de Irlanda, 19-III-2010)


“Un camino de curación, renovación y reparación.” Es el camino que todos cuando pecamos debemos transitar. Curarnos del pecado, y por tanto: no vivir enfermos, no vivir con el peligro de volver a caer. Ser renovados para tener más fuerzas para hacer el bien y evitar el mal. Reparar el mal hecho por medio de una vida mortificada sin pensar en los pecados cometidos, sólo seguir a Cristo crucificado.

Gracias Señor porque Benedicto ha reconocido los errores del pasado por parte de la Iglesia, y desea REPARAR Y RENOVAR; basado en nuestra maravillosa herencia bimilenaria. No ha hecho escándalo, porque el pecado está en nuestra humanidad, porque las cifras son ínfimas (0,07% de los curas han estado inmersos), y porque es parte (TERRIBLEMENTE TRISTE) de nuestra condición limitada y libérrima.

Es sencillo, las fórmulas son las mismas: no abandonar la vida de piedad, y que este inspire la caridad y bondad diaria.

Monseñor Romero: 30 años de su martirio

Cuando tenía 15 años vi la película Salvador de Oliver Stone sobre la guerra civil en dicho país, y supe de la existencia y asesinato de Monseñor Romero; y luego, con la canción que le dedicó Rubén Blades siempre lo recordaba (ver abajo). Desde ese entonces siempre le tuvo una gran admiración. Después pude conocer su vida de varias lecturas que hice. Hace dos años escribí un post que posee varios links a páginas de Monseñor Romero, ver acá. Como hace dos años, lamento la politización de la izquierda radical sobre su vida (algo como podemos ver seguidamente en el video abajo de Telesur).

Monseñor Romero fue un santo, y algún día así lo reconocerá la Iglesia Católica que tanto amó.



30 años sin Óscar Romero en El Salvador (de El País)

El arzobispo, símbolo de la paz, fue asesinado durante una misa.- Amnistía Internacional insta al Gobierno salvadoreño a revocar la ley de amnistía de los responsables

Hoy se cumplen 30 años de la muerte de monseñor Óscar Romero, que fue asesinado en San Salvador en 1980 mientras celebraba una Eucaristía. El recuerdo del arzobispo salvadoreño coincide con un informe de Amnistía Internacional en el que insta al Gobierno de El Salvador a revocar una ley de amnistía "que protege a los responsables de miles de desapariciones y asesinatos durante los 12 años de conflicto armado, incluido el del arzobispo Óscar Arnulfo Romero".

El arzobispo salvadoreño monseñor Romero fue asesinado el 24 de marzo de 1980 por pistoleros mientras celebraba misa en la capilla de un hospital y durante su funeral, celebrado seis días más tarde, los militares mataron a más de veinte personas. Durante sus tres años como arzobispo, Romero pidió insistentemente el fin de esa violencia y defendió el derecho de los más pobres en el país centroamericano.

En un comunicado hecho público en Londres, la organización humanitaria internacional ha hecho al mismo tiempo un llamamiento a las fuerzas de seguridad para que cooperen plenamente con los investigadores permitiendo pleno acceso a sus archivos. "Resulta inaceptable que los responsables de miles de desapariciones, asesinatos y torturas no hayan tenido que responder aún de sus crímenes", ha dicho Kerrie Howard, subdirectora para las Américas de Amnistía Internacional.

Un informe de la Comisión de la Verdad salvadoreña llegó en 1992 a la conclusión de que el mayor Roberto D' Aubuisson, mientras tanto fallecido, ordenó el asesinato del arzobispo a miembros de su servicio de seguridad, que actuaron como "un escuadrón de la muerte".

En 1993, El Salvador aprobó una ley de amnistía por la que impedía procesar a los asesinos y responsables de las numerosas matanzas, denuncia Amnistía Internacional, según la cual nadie ha tenido que responder por los crímenes cometidos durante el conflicto, que se prolongó desde 1980 hasta 1992.

El Gobierno salvadoreño reconoció en 2009 ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos su responsabilidad internacional por el asesinato de monseñor Romero, pese a lo cual, según AI, "no se ha tomado medida alguna para investigar lo ocurrido".

Miles de salvadoreños fueron asesinados, hechos desaparecer, violados o reclutados a la fuerza como niños soldados durante aquel conflicto. Muchos niños fueron asesinados, hechos desaparecer o entregados a otras personas de El Salvador o de fuera del país para su adopción con el falso pretexto de que habían sido abandonados por sus padres. Entre las víctimas había defensores de los derechos humanos, sindicalitas, abogados, periodistas, críticos del Gobierno y en su mayor parte civiles inocentes que no estaban directamente involucrados en el conflicto.

"Vi morir a monseñor Romero"

Menos de 60 personas presenciaron la muerte del arzobispo metropolitano asesinado de un disparo en el corazón la tarde del 24 de marzo de 1980.

Leonor, oriunda de Armenia, Sonsonate, tenía 23 años de edad y estudiaba administración de empresas en la Universidad de El Salvador. Vivía como pupila de un matrimonio en la colonia Miramonte. Solía ir a misa a la iglesia a la iglesia La Resurrección, pero aquel 24 de marzo de 1980, decidió ir a la capilla del hospital La Divina Providencia, sin siquiera saber quien oficiaría la misa, mucho menos en memoria de quien.No era la primera vez que iba a la capilla, por lo menos había ido unas diez veces antes a escuchar misa, siempre a las 6:00 de la tarde.Ese lunes 24 fue a la universidad en la mañana y por a tarde llevó al hijo de la pareja que la hospedaba a pasear al parque de la colonia Centroamérica. En realidad era el pretexto para verse con su novio. A eso de las 5:00 regresó a la casa en la calle Toluca, se bañó y a las 5:50 ya estaba en la capilla.

En la iglesia había alrededor de 50 personas, a lo sumo 60. Adelante estaba sentadas las monjas que cuidaban a los enfermos y un grupo de señores que evidentemente eran los familiares de la deudora a quien dedicaban la misa. Atrás estaban personas que siempre van a las misas, sin importar si conocen al difunto. Ella se sentó en la hilera derecha, aproximadamente en la octava banca.Leonor se sintió sorprendida cuando observó que el oferente de la misa era el arzobispo de San Salvador, Monseñor Óscar Arnulfo Romero. Había escuchado sus homilías y en la universidad todo el mundo hablaba de él pero nunca lo había visto en persona. Le pareció más joven de lo que se veía en los periódicos, su voz más firme que a través de la radio y sobretodo le pareció una persona humilde.

Sabiendo que era toda una figura muy respetada en todo el país intentó poner atención a su sermón , pero estaba preocupada porque al siguiente día tenía que viajar a Armenia a dejar unos documentos que su padre iba a usar para hacer un préstamo. Algunos documentos se le habían extraviado.

Pensando en los documentos estaba cuando escuchó más fuerte la voz de Romero. El arzobispo estaba leyendo, levantó la mirada y en ese momento se escuchó como un fuerte mortero que hizo eco en la pequeña capilla.

Las monjas y las personas que estaba adelante se levantaron, dos señores comenzaron a hacer fotos y Leonor volvió la vista hacia atrás. Alcanzó a ver la espalda de un hombre que caminaba apresurado con un arma en la mano. En ese instante no tuvo reacción más que taparse la boca y llorar. Eran las 6:25 en punto. 30 años después ella reconocería esa espalda, aunque asegura no recordar el color de la ropa. La imagen le que quedado grabada en su subconsciente.

Sobre monseñor mortalmente herido las monjas lloraban y pedían auxilio. Se levantó junto a un señor de avanzada edad que estaba en la misma banca y en una acción refleja caminaron unos cinco pasos hacia donde estaba monseñor. Leonor asegura que vio el último suspiro de monseñor Romero.

Perpleja por lo ocurrido y por el alboroto adentro de la capilla, temió salir a la calle. Pensaba que el asesino podía estar esperando a quienes saliera o que tenía que estar adentro para ayudar a las monjas.

Unos cinco minutos después del disparo, Leonor vio que comenzaron a salir de la capilla algunas personas y se atrevió a salir. En la calle frente a la capilla no estaba nadie ni siquiera pasaban carros. La calle Toluca es poco transitada, pero a las 6:30 de la tarde de un lunes siempre pasaban vehículos. Leonor lo sabía porque ella tenía dos años de vivir en la zona.

Tuvo miedo caminar hacia su casa, ubicada a unas dos cuadras. Lo hizo hasta que escuchó sirenas. Al llegar a su casa lo primero que hizo fue telefonear a su novio y contarle lo sucedido. El novio le dijo que no le contara a nadie más y que no saliera. Él iba a ir a pie a la iglesia para informarse de lo ocurrido.Leonor se encerró en su cuarto cuando de repente la pareja de esposos le fue a tocar la puerta. “Leonor salga, dicen que acaban de matar a monseñor Romero”, le dijeron. Ella salió llorando y le contó que había presenciado el asesinato porque estaba en la misa.La joven ya no quiso salir, mientras que los esposos se fueron a curiosear y regresaron hasta cerca de las 8:00 de la noche. Leonor encendió la radio y la mayoría de emisoras informaban sobre la muerte del religioso, con versiones tan variopintas. En unas emisoras decían que había sido un comando urbano, en otras que personas con uniformes policiales.

El martes 25 Leonor se alistó para viajar a Armenia. Llegó a las 9:00 de la mañana y no pudo evitar narrar a sus padres lo ocurrido. Su madre tuvo miedo y le rogó porque ya no regresara a San Salvador hasta que pasara la “bulla” por el asesinato.Una amiga, que desconocía que ella había presenciado el magnicidio, la llegó a invitar para que viajaran a San Salvador a visitar la catedral donde permanecía el cadáver. Viajaron el viernes, pero en el desvío de Armenia una pareja de guardias detuvo al bus en que viajaban y los revisaron. Les advirtieron que si iban a ver a monseñor Romero les podía pasar algo.

En el camino se encontraron alrededor de diez retenes. Si alguien iba de negro o blanco, en señal de luto, lo apartaban y lo comenzaban a interrogar.

Leonor y su amiga Ana Luisa llegaron a catedral e hicieron una larga fila para ver el cadáver de monseñor. Cuando salieron buscando el mercado central para tomar el bus hacia la terminal de occidente, sintieron que alguien las perseguía. Aceleraron el paso y tuvieron que pagar taxi. Cuando estaban en el vehículo de alquiler notaron que dos hombres armados las perseguían. Ana Luisa tomó el bus hacia Armenia y Leonor se regresó para la colonia Miramonte. Había decidido asistir al entierro el domingo y consideró que iba a ser demasiado peligroso viajar desde Armenia.

El domingo, a las 8:00 de la mañana, Leonor con un grupo de compañeros de la universidad se juntaron en Metrocentro para salir juntos a catedral. Tuvieron que irse a pie porque no pasaban autobuses por miedo a lo que podría pasar en el centro de la capital.A las 9:00 lograron llegar al Palacio Nacional y el gentío era tal que consideraron que no iban a poder estar cerca del féretro. Repentinamente Leonor perdió de vista a sus tres compañeros. Los buscó, pero en aquel mar de gente le fue imposible. Hasta aquí ninguno de sus compañeros sabía que ella había presenciado la muerte de monseñor.

Logró llegar a la segunda calle avenida norte, hoy conocida como avenida monseñor Óscar Arnulfo Romero y con su 1.70 metros de altura alcanzaba a ver la entrada principal. Leonor estaba rodeada por fieles que con ramos pascuales (era domingo de ramos lloraban y rezaban por monseñor. A eso de las 10:50 vio movimientos extraños de hombres armados que se movilizaban en medio de la gente y alcanzó a ver a hombres armados sobre el palacio nacional. Algo raro estaba pasando porque la gente comenzó a ponerse incómoda. De repente, a eso de las 11:00 se escuchó un fuerte estruendo y un enfrentamiento armado. Disparaban desde el techo del palacio y desde el edificio del desaparecido banco Salvadoreño. La gente comenzó a correr de manera desesperada y a intentar meterse a la iglesia. Muchos murieron aplastados, especialmente anciano y niños. La catedral fue insuficiente para dar protección a los miles de feligreses.El tiroteo duró algunos minutos. Cuando terminó mucha gente había huido hacia a plaza Morazán, hacia el parque Libertad y hacia donde pudieron. En la calle quedaron zapatos, rastros de sangre y gente muerte. Algunas a balazos, otras aplastadas.

Leonor alcanzó a correr hacia el parque Libertad, donde se encontró a uno de sus compañeros que con un arma de fuego gritaba a la gente que se quedaran en los portales de la Dalia. No lo volvió a ver nunca más y luego supo que se había ido con la guerrilla.Regresó a catedral cuando la calma había vuelto, alcanzó a ver el féretro de monseñor Romero y se marchó para la colonia Miramonte. El lunes siguiente la pareja de esposos con los que vivía compraron La Prensa Gráfica y en una de las fotos aparecía Leonor observando el ataúd.

La joven tuvo miedo y por recomendación de su padre pasó cerca de un año sin volver a Armenia, porque en el pueblo todos habían visto la foto.Leonor jamás ha vuelto a ir a la capilla la Divina Providencia. Se graduó de administración de empresas a los 27 años se casó y ahora vive en Santa Tecla. Nunca nadie la llamó a atestiguar, aunque de “todos modos mi testimonio no aportaría mucho”, dice.De vez en cuando sueña que está en una capilla y que observa cuando un hombre mata al sacerdote, solo que en sus sueños la víctima es su padre, un hombre que aún vive y que por azares de la vida también se llama Óscar Romero… como monseñor.

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